Por Noam Chomsky
Con el espectáculo de las
elecciones presidenciales cada cuatro años alcanzando su pico, es útil
preguntarnos cuanta atención prestan las campañas políticas de las cuestiones
más cruciales que enfrentamos. La respuesta es simple: mal, o para nada. Si es
así, surgen algunas preguntas importantes: ¿por qué y qué podemos hacer al
respecto?
Hay dos temas de importancia
abrumadora, porque está en juego el destino de la especie: el desastre
ambiental y la guerra nuclear.
El primero está regularmente en
las primeras páginas. El 19 de septiembre, por ejemplo, Justin Gillis informó
en The New York Times que el derretimiento del hielo del mar Ártico se había
terminado para el año”, pero no antes de demoler el anterior récord - y de
hacer nuevas advertencias sobre el ritmo acelerado de los cambios en la
región”.
El derretimiento es mucho más
rápido que lo predicho por los modelos informáticos más sofisticados y que el
más reciente informe de la ONU sobre el calentamiento global. Nuevos datos
indican que el hielo de verano podría haber desaparecido en 2020, con graves
consecuencias. Las estimaciones previas sugerían que hielo de verano
desaparecería en 2050.