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sábado, 5 de mayo de 2012

La disputa keynesianos-neoclásicos

  


Por Daniel Albarracin *


En los últimos tiempos se nos presenta un debate entre los economistas ortodoxos de las corrientes keynesianas y neoclásicas, que a veces se trata de ejemplificar en las formas en que EEUU y la UE están afrontando la crisis. Unos apuestan por un supuesto keynesianismo comprometido con el estímulo y otros, los neoclásicos, con la austeridad. Pero, detrás de esta disyuntiva, ¿hay realmente una confrontación o se está mostrando confusamente lo que son dos rasgos complementarios de una misma política neoliberal?.

En primer lugar, los economistas de la escuela austriaca, como bien sabéis, los más ultraliberales, vienen advirtiendo en los últimos años que en realidad las políticas aplicadas en la UE son enormemente intervencionistas por el papel del BCE, y que por eso los ciclos de la economía privada están alterados, al impedirse la destrucción creadora propia de la crisis. La crisis, para ellos, es buena. Naturalmente, su posición, enormemente sesgada y muy derechista, no se sustenta sólo en una observación subjetiva, sino también en algunos hechos que sí aciertan a señalar.

Por muy lejos que estemos de estos autores, que sin embargo conviene no ignorar, hay una parte de verdad en lo que dicen.

Vengo afirmando que el neoliberalismo realmente existente difiere enormemente del esperado por la escuela neoclásica y austriaca. Sólo un rasgo se está confirmando: el ajuste salarial y social permanente. Pero otros dos no: las políticas monetarias restrictivas y la restricción del gasto público. En la práctica, podemos hablar que lo que estamos enfrentando estriba en un neoliberalismo de estado. No hay menos Estado y más mercado, sino más Estado proburgués y un mercado oligopólico más lucrativo y blindado para las oligarquías gran capitalistas. En la revista Nuestra Bandera, próximamente se publicará un artículo firmado por mí en la que demuestro empíricamente esta afirmación.