Mostrando las entradas con la etiqueta Troika. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Troika. Mostrar todas las entradas

viernes, 13 de julio de 2012

El memorándum de la troika y de Rajoy será un fracaso social y económico

 Por Alberto Garzón Espinosa


El gobierno de Rajoy acaba de anunciar las medidas que le ha impuesto la llamada troika –Fondo Monetario Internacional, Comisión Europea y Banco Central Europeo-, y que sin lugar a dudas conducirán a la economía española a un abismo económico y social. Esta afirmación podría fundamentarse utilizando la teoría económica con objeto de demostrar la ineficacia técnica de las medidas, o también y más rápidamente tras comprobar el resultado empírico que medidas similares están teniendo en países como Grecia y Portugal.
Al margen del lugar en el que estas medidas dejan a la democracia, puesto que son impuestas por órganos no votados por la ciudadanía y representan un programa electoral que tampoco votó nadie, conviene revisar las probabilidades de éxito en lo que se refieren a creación de empleo y generación de crecimiento económico.

El gobierno español está empobreciendo aún más a los trabajadores. Esta mañana ha reconocido que sube el IVA en dos de sus tramos (el normal, hasta el 21%, y el reducido, hasta el 10%), rebaja las cotizaciones sociales un 1% por año, reduce las prestaciones sociales por desempleo y retira prestaciones a los trabajadores públicos. Todo ello significará una pérdida de poder adquisitivo que agravará las consecuencias de una reforma laboral que, por primera vez, ha reconocido Rajoy que tiene como objetivo moderar los salarios.

sábado, 25 de febrero de 2012

Grecia debe romper con la Troika y suspender el pago de la deuda

Por Erick Toussaint.

Es urgente que los movimientos sociales de Europa expresen una auténtica solidaridad activa con el pueblo griego y constituyan una plataforma común europea de resistencia a la austeridad con el fin de conseguir la anulación de las deudas ilegítimas. Una gran parte de la población griega ha mostrado desde el primer memorándum de mayo de 2010 una oposición creciente a las medidas de austeridad impuestas por las autoridades griegas y la Troika: huelgas generales, ocupación de las plazas públicas, manifestaciones en las calles, movimientos de resistencia a los aumentos de las tarifas de los servicios y los transportes, sin olvidar el relanzamiento de la actividad de algunos servicios como el del hospital de Kilkis en Macedonia o la recuperación de la actividad, el 15 de febrero de 2012, del periódico Eleftherotypia conducido por los trabajadores.
La sumisión y el compromiso del gobierno griego con la Troika agravan la situación económica del país y violan los derechos económicos y sociales de la población. El último plan, falazmente llamado «de salvamento», constituye una etapa más del abandono de la soberanía griega a favor de la Unión Europea y los acreedores: el total de los nuevos créditos irá a reembolsar una deuda ampliamente ilegítima y será gestionado directamente por los acreedores.