Por Marshall Auerback *
Hans-Werner
Sinn, presidente del Instituto IFO de Alemania y Director del Centro de
Estudios Económicos de la Universidad de Munich, ha recurrido a las páginas del
New York Times para explicar por qué Berlín está evitando un nuevo rescate para
Europa. Uno de los principales argumentos de Sinn contra la participación
alemana en el rescate de la deuda de los países del sur de la zona euro es
jurídico: “El rescate -escribe- está vetado por el Tratado de Maastricht, que
no solo gobierna la eurozona, sino que es derecho aplicable en cada estado
miembro. El Tribunal Constitucional, pues, estaría obligado a rechazarlo”.
Sinn también
sostiene que la situación de los países del sur ya está exponiendo a Alemania a
un inmenso riesgo crediticio: “Si Grecia, Irlanda, Italia, Portugal y España
entraran en quiebra y dejaran de pagar, aunque el euro sobreviviera, Alemania
perdería 899 mil millones de dólares. Si el euro cayera, Alemania llegaría a
perder más de 1,35 billones de dólares, más del 40 por ciento de su Producto
Interno Bruto”.